Esta preña ha resultado distinta, más cansada que de costumbre. La tarde se ve alejarse. Mi andar es denso y la colina no merma en su subida; estos pies míos desfallecen. La espalda se hunde. Juro que es el primero que me obliga a echarme en medio del campo, con otros pude atravesar las praderas en una noche, comer hasta de la planta más alta sin tener que maldecir mientras estiraba mi cuello. No es llanto. Dice el médico especializado que mi hijo debe venir de grandes dimensiones. Él o yo. Sólo deseo que este tormento llegue a su fin; cada día debo enfrentar la batalla de permanecer de pie las ocho horas de sol y el aliento me está faltando. |
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Cristina Arreola Márquez (Colima, 1988). Es licenciada en Letras Hispanoamericanas por la UdeC y actualmente cursa la maestría en Estudios Mexicanos por la UdeG. Se ha desempeñado en el periodismo, edición y corrección de estilo, así como en la promoción cultural. Parte de su trabajo se encuentra publicado en antologías como A la rosa, muestra de mujeres poetas en Colima, a cargo del poeta Sergio Briceño, y en suplementos culturales como: Destellos, Ágora, La jirafa, Periódico de Poesía de la UNAM, y Revista Monolito, en este último actualmente funge como jefa de redacción. Es autora de la plaquette Nínive de la colección Ouroboros de narrativa (UdeC, 2010). |