DOSSIER / junio - julio 2023 / No. 105

Lista para la aventura


Epifanía Martínez



Leí por ahí que los ciclistas son una especie de aprendices de suicida y, quizás, un gran número de personas concuerda con la idea pues, aunque no queramos mirar, las noticias que engrosan las cifras de accidentes letales aparecen de pronto al compás de las pantallas de nuestros teléfonos. Por esa razón, puede ser lógico desistir de usar la bicicleta, sobre todo si en ella se ha sufrido una aparatosa caída.

Sin embargo, después de semejante tragedia, dejar de usar la bici no es una opción convincente. Retomar el pedaleo no es tan difícil una vez que el cuerpo empieza a recomponerse —ojalá todos tuvieran esa suerte—. Lo difícil es escapar de las voces que alientan a dejar el “peligroso” artefacto olvidado en el rincón más invisible de la casa, aunque habría que comprender su insistencia, sobre todo si los dueños de esas voces te miraron rota. Tal vez quede escucharles, pues su miedo es más cercano al amor que al control ejercido sobre una. Se debe tomar en cuenta que sólo quienes no han tenido la fortuna de usar una bicicleta se atreverían a alentar su desuso. Entonces, con firmeza, se necesita decir que andar en bicicleta es un acto incomprendido que celebra la vida.

Al retomar el pedaleo se hace presente una emoción familiar, una especie de amor a la vida que va creciendo conforme avanzas. A pesar del viento que se cuela por las fisuras aún frescas de tus huesos y te recuerda el dolor de la convalecencia, con cada pedaleo vas reconociendo tu cuerpo y la fuerza que radica en él; aceptas su fragilidad y el riesgo latente de que cualquier instante puede ser tu último suspiro. Quizás la conciencia de ese riesgo hace que suicidas y ciclistas se parezcan tanto, pues a pesar del miedo sigues avanzando, apropiándote del territorio, disponiéndote para la aventura.










Epifanía Martínez Rosete (San Gabriel Chilac, Puebla). Es egresada de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Actualmente, colabora en Cine Inminente en Tehuacán, y en Convites Culturales de la Dirección de Animación Cultural de la Secretaría de Cultura.


 

Punto en Línea, año 16, núm. 110, abril-mayo 2024

Punto en Línea es una publicación bimestral editada por la Universidad Nacional Autónoma de México,
Ciudad Universitaria, delegación Coyoacán, C.P. 04510, Ciudad de México, a través de la Dirección de Literatura, Zona Administrativa Exterior, edificio C, 3er piso,
Ciudad Universitaria, Coyoacán, C.P. 04510, Ciudad de México, teléfonos (55) 56 22 62 40 y (55) 56 65 04 19,
http://www.puntoenlinea.unam.mx, puntoenlinea@gmail.com

Editora responsable: Carmina Estrada. Reserva de Derechos al uso exclusivo núm. 04-2016-021709580700-203, ISSN: 2007-4514.
Responsable de la última actualización de este número, Dirección de Literatura, Silvia Elisa Aguilar Funes,
Zona Administrativa Exterior, edificio C, 1er piso, Ciudad Universitaria, Coyoacán, C.P. 04510, Ciudad de México,
fecha de la última modificación 10 de abril de 2024.

La responsabilidad de los textos publicados en Punto en Línea recae exclusivamente en sus autores y su contenido no refleja necesariamente el criterio de la institución.
Se autoriza la reproducción total o parcial de los textos aquí publicados siempre y cuando se cite la fuente completa y la dirección electrónica de la publicación.