Vuelvo a mí
Angélica Mancilla García
I
Vuelvo a mí
tiemblo
me desvanezco hacia adentro
al origen, vientre-universo.
Escucho la memoria
potencia primigenia impoluta.
La vocecita ruge
retumba
quebranta la cajita de cristal.
Me arranco de sus códigos
ya no significan nada
ese no es mi hogar.
Fisura
Grieta
Socavón
Vuelvo y me habito enorme, completa
a veces tundra a veces selva
constante es la contradicción
conjurando un nuevo orden
el de hijas, madres y abuelas.
Curada de espanto y empacho
renace obsidiana la mirada
observa diferente
pronunciando la lengua arrebatada
mariposa que no aletea
palpita
me devengo en Una
en la Primera
nunca más la-otra,
vuelo a mí.
II
Yo soy
habitante-habitada por una constelación
conjugación en verbo transitivo
reminiscencia de pasado
y recuerdo de futuro.
Me levanto tomo mi mano
me acompaño
reorganizo mis entrañas
las nombro distinto
vida
y dejo que desciendan en un hilillo
coágulos negroamapolas
hasta mis tobillos
en alumbramiento de mí misma
de elegirme sólo a mí.
Hundo las yemas de mis dedos
palpitantes
sobre las costuras de mi piel
no son cicatrices,
sino los límites de un sendero recalcitrante.
Aquí llueve todos los días
pero el arcoíris vuelve a salir.
Aleteo de un instante dilatado
aquí estoy
sentada a lado de las otras
i n g r á v i d a s
nos abrimos a la risa simple prolongada
en el tren de vuelta a casa
donde construimos un hogar
¿acaso esta es la felicidad?
Probablemente.
III
Heredera de la sangre de mis madres
y de las madres de mis madres
conjuro guisos, rezos y pociones
/Alimento/ /Palabra/ /Sanación/
para que el silencio se apague
para que la piel brille tornasol
para que la memoria nos convide de su rabia
para que vivir no sea un anhelo
ni la alegría una aspiración
para que ninguna más nos falte.
Yo seré esta voz
IV
Volveré
una y otra vez
al vientre-universo
que me seguirá pariendo mujer.