Donde todo te habita
Eduardo Rosales
Mira
cómo la niebla
teje misterios
en los hilos
finísimos
de la memoria
Urde
con su trama de cristal
un canto
al silencio
que se vuelve
remanso
compañía
Amanecía tu voz
Despierto
con tu voz que canta
ese viejo bolero
todas las mañanas
confundido
en la luz inicial
en las aves ocultas
enramadas
a pecho
agradecida
dichosa
por haber amanecido
entreverada en el día
que busca tu claro canto
para completarse
y refulgir
aun cuando una nube
tape el sol
Tradición
Oyes los pájaros
claros y sutiles
en su canto que amanece
como si al despertar
hubiesen recogido del rocío
las voces dispersas
del grillo y las estrellas
Arvo Pärt
la música
es un espacio
lleno de tiempo
un lugar de sosiego
un tenue templo
erigido
en el laberinto
del oído
que recuerda
el olvidado amor del mundo
Mezcal
este fuego bravo
que cabalga en la noche de la garganta
¿a dónde va?
¿a dónde quiere llegar
galopando
con sus dulces cascos ardientes?
Va hacia el centro de ti;
hacia el abismo de miel
donde todo te habita,
donde eres un llano
en llamas
que domina
la muerte.